Beneficios de la rehabilitación logopédica en la parálisis facial: un caso real.

Beneficios de la rehabilitación logopédica en la parálisis facial: un caso real.

La parálisis facial (PF) es la pérdida total o parcial (paresia) de la movilidad de la cara por afectación del nervio facial impidiendo que éste no envíe la orden para producir los distintos movimientos faciales ocurriendo así porque el 80% de sus fibras son motoras. Este nervio suele ser el más afectado del cuerpo humano.

La parálisis facial se puede clasificar según la localización de la lesión, en central (PFC) en la cual el daño se produce en la neurona motora superior, o periférica (PFP) en la que se daña la neurona motora inferior. En la PFC resultaría comprometido el movimiento del tercio inferior facial del lado contralateral a la lesión y en la PFP quedaría comprometido el movimiento de toda la hemicara homolateral. Una de las más comunes es la parálisis facial de Bell, la cual se cree su causa viral e ilustra el encabezado de esta entrada.

En las líneas que siguen expondremos un caso real tratado por Andrea, logopeda en Neurat, y que deseamos despierte vuestra curiosidad por el tema.

Se trata de una mujer, de 76 años, con una paresia facial perfiférica derecha (PFPD) sin causa aparente de 1 año y 7 meses de evolución. La PF en fase inical flácida fue de grado V, disfunción severa, según el sistema de clasificación House-Brackman en la que la asimetría era notable en reposo y en movimiento, el cual estaba muy comprometido.

Se trata de una persona nerviosa, sin patología neurológica previa, a tratamiento neuropsiquiátrico por depresión. Ante el debut de la parálisis facial acude rápidamente a urgencias manifestando una leve asimetría del labio y progresivo aumento de la asimetría facial. Refería granuloma anular.

Inicia rehabilitación logopédica en Neurat el día 2 de Julio del año 2020 mostrando una parálisis facial de grado IV, disfunción moderada, según el sistema de clasificación House-Brackman en la que la debilididad era obvia y la asimetría evidente al reposo y al movimiento.

De la valoración de la musculatura facial a su llegada a Neurat se concluyó para la hemicara afecta:

– Tercio superior facial: reducido el tono en el músculo orbicular del ojo y en el corrugador derechos. En reposo se apreció en ellos ligera debilidad. Y en movimiento no apretaba ni ojo ni ceja del lado afecto.

– Respecto al tercio medio facial, mostraba hipotonía muscular en los elevadores del labio superior y alas de la nariz así como del ángulo de la boca para el lado afecto. No era capaz de arrugar la nariz y al hacerlo desencadenaba compensaciones con otros grupos musculares. En el músculo buccinador evidenciaba hipotonía comprometiendo a la función, lo que se traducía en la acumulación de alimentos en el carrillo derecho al igual que heridas al morderse. No inflaba el carrillo derecho y era incapaz de alternar el aire.

– En el tercio inferior facial se apreció un aumento del tono muscular en el orbicular labial, hipotonía en el risorio al igual que compensación muscular con el risorio izquierdo.

En el órgano lingual se observó mucha tensión al igual que movimientos mandibulares compensatorios.

Además se observó una dificultad para la realizacion de los ejercicios activos con muchas compensaciones con el lado facial sano. Esto es un hándicap en la rehabilitación ya que de esta manera no trabajamos sobre los grupos musculares del lado afecto. Una de las compensaciones que realizaba era al cerrar el ojo derecho que se activaban todos los músculos de la cara (elevadores, risorio, corrugador…).

Destacar que la paciente llevaba desde noviembre de 2019 en seguimiento por neurólogo que realiza procedimiento con botox en el orbicular del ojo derecho.

Finalizada la valoración logopédica de la paresia facial se programa la terapia con 10 sesiones, con frecuencia de 2 sesiones por semana, en la que se realiza terapia miofuncional, con ejercicios pasivos y activos, kinesiotaping y se aplica electroestimulación de baja frecuencia.

Iniciado el tratamiento y al cabo de 2 sesiones ya realiza mejor los ejercicios y se ofrecen para realizar en el domicilio aquellos en los que no hay compensación y realiza adecuadamente.

La evolución de la paresia fue rápidamente progresiva a pesar de encontrarse en fase de secuelas. En la cuarta sesión era capaz de cerrar el ojo con más fuerza y la paciente era consciente de ello. Notaba mejoría, ya no se mordía y tenía más rango de movimiento en lateralización lingual lo que le facilitaba recoger los restos de comida. Asimismo superaba el límite de tiempo de efectividad del botox en el ojo.

En la novena sesión se aumentan los ejercicios para el domicilio al haber sido automatizados y realizarlos sin compensaciones. Mencionar que todavía no realizaba todos los ejercicios establecidos en el plan terapéutico sin compensaciones con lo cual no se pautaron todos para casa, por ejemplo al fruncir el ceño y sonreír del lado afecto.

Finaliza el tratamiento logopédico tras la décima sesión y se da un período de descanso y mantenimiento con la realización de los ejercicios en el domicilio ofreciendo trucos para la realización de los mismos.

Destacar la efectividad de la aplicación del kinesiotaping en el buccinador y de la electroestimulacion en el ojo y en la boca.

Retoma la rehabilitación logopédica el 10 de septiembre, programando otras diez sesiones. Refiere haber realizado los ejercicios tal y como se le pautó, 2-3 veces al día.

Tras el período de descanso y mantenimiento en el domicilio se observó con respecto a los cambios observados al descanso:

– Tercio superior facial: el ojo más cerrado, hipotonía en el músculo superciliar derecho. Compensaciones con la boca para cerrar el ojo al igual que al arrugar la nariz y sonreír lateraliza la mandíbula.

– Tercio medio: Persiste alteración al iInflar carrillos alternando el aire.

– Tercio inferior: Compensación también al realizar un beso prolongado que cierra el ojo. Reducción de la fuerza en la comisura derecha al sonreír.

Independientemente de la evolución progresiva de la paresia facial, en el período final del tratamiento la paciente refería bastante malestar impidiéndole el cierre del ojo realizar actividades básicas de la vida diaria como comer, coser, leer…

Es importante mencionar que en la última aplicación de botox en el orbicular del ojo derecho, habían pasado 6 meses aunque la paciente refirió necesitarlo a los 4 meses hasta cerrársele el ojo. Es decir, gracias a la rehabilitación fue 2 meses más efectivo ya que era lo que le venía durando.

Al finalizar el tratamiento logopédico se concluyó la evolución de la parálisis a un grado II, disfunción leve, según el sistema de clasificación House-Brackman caracterizada por una debilidad superficial a la inspección cercana y con un tono y simetría normales en reposo. Es por este caso y muchos más que se concluye una efectividad del tratamiento logopédico en parálisis facial incluso en fase de secuelas.